Hace unos días me preguntaron qué colores representaba la transición de invierno a primavera...
Ufff, la verdad no supe responder con exactitud, por mi cabeza atravesaban miles de ellos que en realidad venían de pensar en tooodooo lo que vuelve a nacer con esta estación, como lo son las flores, frutas, verduras, aromas, sabores y hasta en ese solecito diferente que tiene un brillito especial resplandeciente.
Y pensando en todo esto, quise compartirte un poquito de conexiones entre colores, aromas, frutas y flores, que además puedes encontrar en AlyRo para acompañar esta primavera:
Un color fresco y divertido, que sugiere fantasía y vivacidad.
Si es tu mood, tenemos algunas sugerencias para ti... Aquí
Amarillo Manzanilla:
Si pienso en amarillo, pienso en la manzanilla, que como la luz del sol, son ideales para acompañar momentos creativos y de mucha presencia. Sugerencias aquí
Rosita Calientito:
Suavecito, que abraza, presente de tantas maneras: flores, frutos y bebidas.
Aquí muuucho rosita
Blanco, Vainilla y Café:
¿No les parece loquísimo todooo lo que nos brinda la tierra? Incluidos tantísimos aromas... Encuéntralos aquí
¡Hola!
FEBRERO, FEBRERO...
Después de un eterno enero, ahora con más calma podemos platicar agarrando vuelito de este año.
¿CÓMO ESTÁS?
¿Qué cosas agradeces hoy? ¿Cómo se siente tu corazón?
Hablando de corazones… este mes se caracteriza por ser el mes del amor y aunque yo sé que sabes y sabemos que el amor se celebra y se hace diario, también siento que es lindo tener un mes con una fecha especial para dedicárselo a eso.
Y aunque no me encanta la idea de vender y comprar cosas para este día específicamente, sólo porque sí, me gusta pensar en los amores que tenemos y celebrar con muchas fuerzas la capacidad que tenemos dentro de nosotros para sentir y experimentar amor.
Me resulta fascinante la idea de que podamos sentirlo con muchas cosas en un mismo día. No siento que el amor sea sólo un sentimiento. Creo que el amor es una postura, una decisión, una afirmación, una acción y una manera de vivir.
También, últimamente se habla del amor que sentimos por nosotros mismos y lo importante que es. El muy escuchado amor propio. Autocuidado. Obvio si conoces nuestro espacio, en AlyRo, sabes que somos fanáticas de todo eso. Nos movemos y regimos por el amor propio. Somos apasionadas e intensas al respecto. Pero, también somos conscientes de que no es tarea fácil. Lo experimentamos diario nosotras mismas...
Que no es como en las pelis en donde se ve que la protagonista se echa a una tina llena de rosas para comerse un chocolate y prender una velita al salir. Que no es tan fácil como amar de pronto cada aspecto de ti. El amor propio tiene muchas esquinitas y huecos. Es complejo, complejo. Es profundo, cero lineal, engañoso, complicado y muy hermoso. Tiene muchos cachitos de obscuridad por descubrir y muchos rincones por desaprender.
Además, por mucho tiempo hemos escuchado que para que puedas recibir amor del real y del bonito… debes primero amarte a ti mismo. Que si quieres que alguien te quiera, primero debes quererte a ti. Creo que es momento de empezar por desaprender eso de ahí. Porque no es cierto. El amor propio no tiene un reloj, no conoce de tiempo, ni de condición. Tampoco tiene vigencia ni caducidad. No es algo que se domine ya para siempre, es algo que como las olas del mar, va y viene.
El solo hecho de haber nacido y ser un humano, una persona, te hace ser merecedor o merecedora del amor; del profundo, del honesto, del real, del comprometido, del bonito. Naciste con la capacidad para sentirlo y por lo tanto con el derecho de recibirlo.
Puede costarte trabajo perdonarte algunas cosas, puede ser difícil amar lo que te dijeron que debías odiar de ti. Puede ser difícil caerte bien cuando alguien se fue de tu lado por elección propia. Hace unos días o hace meses, incluso años.
Puede que estés en el proceso de amar lo que más te molesta de ti y que no hayas aprendido todo lo que vas a aprender en la vida, pero en el mientras, en el hoy y en el ahorita, ya mereces ser amado, amada y encontrar amor. No sólo con alguien, sino también en todos lados y en muchas situaciones.
No necesitas estar resuelta para estar caminando en el territorio del amor.
Te dejamos acá unas propuestas de tres o cinco cositas de regalo para disfrutar haciendo y viviendo en el amor... contigo, con alguien, con amigos, amores, amistades, para celebrar a tu manera la increíble capacidad de sentir, dar y recibir amor.
Propuesta para endulzar:
Propuesta para apapachar con algo calientito:
¡Holaaa, holaaaa!
En este mes que ya casi acaba pasaron varias cositas, muucho movimiento y cambios que pronto les estaremos contando, también fue un mes en que celebramos las fechas patrias, lo que me llevó a pensar en todas esas personitas increíbles que nos visitan en la tienda y que vienen de diferentes partes del mundo… en cómo se les dibuja una sonrisa cuando les contamos que todo lo que albergamos es 100% local, hecho en México y con mucho amor.
Lo que me llevó al segundo pensamiento, y es que ser casa de proyectos cultivados aquí, también es una forma de honrar y celebrar lo que crece en esta parte geográfica de la tierra que habitamos, no sólo este mes sino a diario, porque para que germinaran y hoy se puedan seguir cosechando requirieron de muchísimos cuidados y atenciones antes…
Por eso hoy les quiero contar un poquito lo que hay detrás de algunos proyectos que nos han acompañado por varios años:
Remedios del Bosque:
A lo largo de su historia, María Violante junto con su equipo, ha regenerado más de 5 hectáreas de cultivo con métodos de agricultura regenerativa. Todo todoooo lo que pones en tu piel de Remedios del Bosque es de plantitas cultivadas en la Sierra Sur, en la Costa Chica de Oaxaca y en Huasca de Ocampo, Hidalgo.
Y siempre han tenido muy clara la relación que quieren tener con la tierra. Por eso, son conscientes de su importancia, “por lo que además de proteger más de 70 hectáreas, las que utilizan para el cultivo de sus materias primas son trabajadas con amor y respeto, materializado en técnicas enfocadas en regresar los minerales necesarios para restablecer su microbiota, pues la reproducción de los microorganismos del suelo es esencial para su recuperación, es así como han logrado mantener un suelo fértil y permitiendo que el ciclo natural de la tierra continúe”.
Chocos de Kakoa:
Lo más importante de estos chocolates es la selección del cacao que se usa para elaborar artesanalmente cada chocolatito, y por supuesto las manos de quienes lo cosechan con tanta dedicación, pues viene de pequeñas comunidades en Tabasco y Chiapas.
“Uno de los principales productores cacaoteros de Kakoa es Rafael. Su hacienda, “Hacienda Napaná”, está en Pichucalco, Chiapas. Esta hacienda pertenece a su familia desde hace 30 años cuando su abuelo la compró, sin embargo, se ha sembrado cacao en esa tierra desde 1854.
Además de cacao, se siembran piña, mamey, plátano, yuca, chayote entre otras frutas y verduras que ayudan a abonar y a fijar el nitrógeno en el suelo, al igual que a dar sombra a los árboles de cacao. Esto y las lluvias afectan directamente al sabor del cacao, es por eso, que en la época de lluvias, podemos distinguir notas afrutadas, y en época de secas, notas a frutos secos como almendras”.
Flor de venus:
Este proyecto que uff huele deliciosísimoooo con cada velita que crea, que seguro ya te has llevado a casa y sabes de lo que hablamos, inició en una pequeña cocina en Monterrey, desde siempre utilizando cera de soya y para sus aromas delis una combinación de aceites esenciales naturales y fragancias aromáticas, con una intención súper clara: “transportar a las personas a lugares específicos o crear ambientes surreales a través de los aromas”. ¿Y por qué son aromágicas? En palabras de su cofundadora Laura Carretonera:
“Me gusta pensar en ese poder del aroma, que si no fuera normal y cotidiano, pensaría que es hasta sobrenatural. ¿Cómo explicamos el poder de saber que va a llover con tan sólo oler a tierra mojada antes de que caigan las gotas, o cuando sabemos que tu vecinx está cocinando algo delicioso sin si quiera verlo? El olor a césped cortado a lo lejos. Si me lo preguntas, es pura magia".
Y por si no lo sabías, en su página web puedes encontrar las propiedades de cada velita y para qué tipo de rituales te pueden servir.
Esperamos que te hayan gustado estas pequeñas historias detrás de cada proyecto hecho en México. Y por supuesto, te esperamos en AlyRo para seguir apoyando todo lo que crece en esta tierrita.
]]>
Y ahora la pregunta era cómo… después de darle varias vueltas y hablarlo con varias amigas, aparecieron sugerencias…
Como cuidándonos desde el amor…
Apapachándonos con esa comida deli que tanto nos gusta, sobre todo en esos días difíciles…
Escuchando nuestro cuerpo cuando nos pide parar para tomar un descanso y por qué no, consentirlo con algún masajito.
Acompañando nuestras emociones al permitirles ser, expresarse, salir a flote.
Nutriendo nuestros sueños aprendiendo eso que tanto hemos pospuesto.
Siendo nuestro propio refugio cuando todo pesa y ese abrazo donde llegar, siendo nuestro propio hogar.
Porque nos enseñaron que maternar era algo que recibíamos, y lo cierto es que es algo que también podemos brindarnos.
Hace mucho bien, maternarnos.
Espero que esto se haya sentido como un abracito en medio de la lluvia.
Y para despedirme quiero dejarte algunas cositas e ideas que nos encantan en Alcachofa y Romero que podrían ayudarte en este proceso de maternarte:
-Una velita sanadora de Glou para armonizar tu espacio.
-Unas cartitas con mensajes de afirmación para cuidar tus pensamientos.
-Una taza lindísima para prepararte un cacao deli que te apapache el corazón.
-Un aceitito relajante para consentir a tu cuerpo con un masajito después de un día laaaargooo.
Y si se te ocurren más ideas sobre cómo maternarnos me encantaría leerte en los comentarios...
]]>Aaaay, los cambios de estación. Me impresiona lo diferente que es cada una y los cambios que se pueden notar alrededor.
El árbol de enfrente de mi casa tiene estas bolitas rojas intensas cuando llegamos a mediados de primavera. Los pajaritos las aman. Se paran en una rama y después de lograr balancearse por un rato, las pican para comer unas al momento y luego se guardan otras y se las llevan seguramente a sus nidos.
El cambio es la única cosa segura en esta vida. Y creo que también es una de esas cosas que a veces nos cuesta aceptar. Estos últimos años he aprendido que mi cuerpo también tiene derecho a cambiar. Toda yo, mi personalidad, mis gustos, mis creencias, mis amistades, mis prioridades. Tengo derecho a evolucionar y cambiar. Verme en el espejo y reconocer que me veo diferente porque cambié y que eso no es malo, es un espectáculo.
También, no siempre necesitamos lo mismo, hay etapas para todo y eso me lo enseña mi piel, mi pelo. Estaba el otro día en mi rutina diaria viendo y sintiendo mi piel y me dije un comentario bastante aprendido: “Tengo la piel acartonada”, en tono de desprecio o desaprobación. Antes ahí lo hubiera dejado, y hubiera seguido el día queriendo tapar esas “imperfecciones” y sentirme lo suficientemente decente frente a estándares de belleza para continuar con mi día.
Pero esta vez me detuve. Respiré profundo y pensé: Creo que mi piel me está queriendo decir que necesito cosas diferentes. Acabamos de cambiar de estación, hace mucho calor, mucho sol, la contaminación ha estado a tope, y si soy honesta, no he tomado tanta agua en los últimos días porque he andado ocupada. Tampoco he comido tantas verduras verdes de las que me gustan. De un momento a otro sentí que hablaba con mi cuerpo y lo escuchaba, sobre todo.
Ese día probablemente cambié el suerito que llevaba poniéndome todo el invierno y escogí uno para verano. También ese día me puse una cremita extra en la noche y masajeé mi piel mientras tomaba agua. Al día siguiente compré rábanos a buen precio en el mercado porque están de temporada, cargados en agua, fibra y minerales. Ese día reconocí los cambios y fluí con ellos. Ese día fue algo de la piel y ya pero, ese momento de escuchar y aceptar el cambio que me trataba de enseñar algo, terminó dándome una lección.
Últimamente abrazo los cambios, no sólo los de la estación. Y por eso se me ocurrió compartirles algunos de nuestros sueros y tónicos favoritos para la piel seca o deshidratada:
Serum masaje facial. Lo he estado usando DIARIO en las mañanas después de lavar mi cara. Se absorbe delicioso y es ideal para dar masajes con guasha o con las manos. Tiene ingredientes básicos pero claves para la hidratación. Es para todo tipo de piel.
Elixir de noche. Este, la piel se lo toma literalmente. Me encanta que sea para la noche porque lo absorbe por completo y en la mañana la piel amanece suave. También tiene aceite de jojoba.
Tónico facial. De mis favoritos y hasta lo cargo en la bolsa para podérmelo echar a la mitad del día. Tiene geranio y extracto de orquídeas. Aunque es un tónico, se siente que hidrata al instante. También se puede usar como sellador de maquillaje.
Estas son algunas de nuestras cremitas favoritas para hidratar a profundidad la cara:
Crema ácido hialurónico, es suave con la piel y súper hidratante. Además ayuda a la elasticidad de la piel y por lo mismo la recomiendo mucho en pieles maduras.
Crema de día. Es de aloe y aguacate y es ideal para quien necesite una crema más espesa. Con poquitita cantidad cubres toda la cara
Crema de día y de noche. La favorita para hombres. Lo que me gusta es que tiene caléndula que ayuda a regenerar la piel. Además tiene protección de rayos UV.
Estos son algunos de nuestros aceites y cremas para masajear el cuerpo y dejarlo suavecito:
Nube de algodón, el nombre lo dice todo. Es una nubecita en textura. Es una mantequilla corporal con vitamina E y lavanda que se puede poner en todo el cuerpo.
Aceite Tonificante, Para masajear el cuerpo y dejar la piel activa y despierta. Se absorbe perfecto como una crema y relaja al instante.
Crema de fuego. De las favoritas de todos. Esta crema dan ganas de nadar en ella. Hidrata y se siente fresco porque tiene ligero aroma a menta. Tocas tu piel durante el día y se siente suave suave.
Y para despedirme, quisiera invitarte a que me compartas tú qué otros cambios abrazas en los comentarios…
¡Feliz y renovadora primavera, nos vemos en la siguiente Carta del Blog!
]]>Hace 4 años yo sentía que no había opciones tan a la mano, de productos mexicanos bien hechos en un sólo lugar.
Tenía que ir a un bazar o a alguna pop up ocasional.
Yo empecé a usar productos naturales para mi, porque estaba cansada de ir al súper y comprar cosas para mi cara o para mi cuerpo, que tenían un sinfín de ingredientes raros, fragancias y químicos. No me hacía sentido.
Encima de todo, tampoco me hacía sentido comprar un desodorante cada 2 meses y tener que tirar un empaque plástico a la basura. Un empaque que jamás se iba a deshacer. Al menos no en un futuro cercano, ni en el futuro de los nietos de los nietos de mis sobrinos.
Empecé a buscar productos que fueran amables con mi cuerpo.
Fui descubriendo marcas pequeñas con productos realmente buenos.
Encontré desodorantes, jabones, maquillaje… Era poco pero me sumergí en la búsqueda y cada que encontraba algo increíble pensaba: “Todo mundo debería conocer esto”.
Y un día, caminando por ahí, encontré este cachito de espacio que hoy tenemos y sentí algo.
Como si hubiera visto cosas pasar frente a mis ojos. Sentí que podía llegar a algo.
Abrimos con como 5 marcas y los pocos productos que existían.
He visto la evolución de cada una de ellas y de nuevos proyectos que salen, queriendo ser la alternativa e ir contra corriente.
He descubierto proyectos que enamoran de principio a fin.
No ha sido fácil. Y también, la responsabilidad ha crecido. Nos hemos mantenido firmes con los proyectos que queremos ofrecer en nuestro espacio.
Creo firmemente que un producto que dice ser ecológico viene y nace de una marca que se compromete a ver por los residuos que genera y el impacto que tiene en el entorno.
No ha sido fácil porque a veces lo que más vende o lo que más se busca no necesariamente es la mejor opción pero nos hemos mantenido firmes a ofrecer lo que realmente nos representa. Acá va.
1. Que sea vegano y libre de crueldad, porque creemos que no es necesario usar la vida de los animales de ninguna forma para nuestro beneficio y mucho menos para productos cosméticos.
2. Que sea natural, sí, pero con respeto a las plantas también. Nuestros proveedores estudiaron herbología micología o medicina. Hacen los productos con cuidado y con el respeto de los tiempos en la planta y en el suelo.
3. Funcionan. Traen un beneficio a quien los usa. Porque de nada sirve que algo sea ecológico y natural, si no funciona bien.
Y sobre todo, que lo que prometen ser, son.
4.Tienen algún tipo de compromiso con los residuos que se generan. Tienen algún programa de retornos de envase, de relleno, de rehuso o de reciclaje.
5. Tienen una intención detrás. Están hechos con amor, tratan a las personas involucradas de forma justa y ética. Son proyectos que promueven el trabajo en equipo, la comunidad y lo local.
Suena cursi pero, eso es lo que ha hecho moverse alcachofa y romero. No la ubicación de la tienda, no mis followers de instagram, no la moda.
Si no, la elección de mantenerse firmes a realmente hacer las cosas diferentes.
Gracias por unirte con nosotros.
Con cariño, Alcachofa.
]]>